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 Marco de la realidad

       En la diócesis de Zacapa existe una gran conciencia sobre la formación litúrgica. Es una tarea importante y urgente en la que se continúa trabajando con esfuerzo y constancia. En la joven historia de la Iglesia en Zacapa y Chiquimula podemos decir que:

·      Los obispos se han esmerado y preocupado por cuidar el Deposito de la Fe en cuanto a liturgia se refiere.

·      Obispos, presbíteros y diáconos manifiestan un profundo conocimiento y cuidado por la Santa Liturgia en la que se continua el memorial de la Pasión, muerte y resurrección de nuestro Señor Jesucristo.

·      Los agentes de Pastoral en conjunto con el resto de los fieles tienen profunda piedad y celo por las celebraciones litúrgicas.

·      Debemos resaltar que debido a la extensión territorial de algunas parroquias y el descuido en la formación litúrgica no se tiene muy claro dicho tema, por lo que hay que fortalecerlas mediante la catequesis.

 

 Visión

Una comunidad de bautizados, en comunión con el Obispo, presbíteros, diáconos, religiosos y religiosas que con una fa madura, adulta y responsable comprende y celebre la fe, mediante la Eucaristía, Misterio Pascual de Cristo, centro animador de la iglesia y núcleo de la vida cristiana. La liturgia es una oración de la iglesia, inspirada y guiada por el Espíritu Santo, en la que Cristo continua haciéndose presente a fin de entrar en nuestra vida.

Misión

Promover un mayor interés en la formación litúrgica de los Sacerdotes, Seminaristas, Religiosos y Laicos, y purificar ideas y abusos en la Liturgia. Para que las comunidades vivan su fe en la centralidad del Misterio Pascual de Cristo, promover la Pastoral del Domingo, para vivir el encuentro con el Resucitado y fortalecer la unidad de la Iglesia. “La Iglesia que celebra es “Casa y Escuela de Comunión”, “Comunidad de amor”.

Promover una catequesis mistagógica de cada sacramento destacando la centralidad de Cristo y la Pascua en ellos. Redescubrir los valores evangelizadores de la piedad popular y promoverla como camino de encuentro con Cristo vivo, suscitando desde ella una espiritualidad que lleve al compromiso de la vida cristiana.

Promover la participación consciente, plena y fructuosa de todo el pueblo de Dios, de manera que la liturgia forme auténticos discípulos y testigos de Cristo, solidarios y justos. Que la comprensión de los signos, gestos y ritos de los sacramentos lleve a una mayor vivencia de la celebración y a un mayor compromiso en la vida.

Fortalecer la formación y promoción de los ministerios litúrgicos y unificar criterios de formación en las diversas diócesis del país.

Acompañar con celo pastoral la piedad popular “valorando positivamente lo que el Espíritu Santo ya ha sembrado”, para hacer de ella lugar de encuentro con el Señor, promoviendo en ese ambiente una catequesis litúrgica que les acompañe durante el año litúrgico.

 

  Objetivos

·      Promover la Liturgia como tiempo y espacio sacramental privilegiado del encuentro con Cristo vivo, donde los discípulos penetran más en los misterios del Reino y expresan de modo sacramental su vocación de discípulos y misioneros.

·      Animar la formación litúrgica, para que sea comprendida y asumida como “fuente y culmen” de la vida y la misión de la Iglesia, especialmente la Eucaristía, para que la vida adquiera una “forma eucarística”.

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